Himno a la Madre

El himno de la madre es un tributo en memoria de la acción heroica de mujeres cochabambinas en la Colina de San Sebastián, el 27 de mayo de 1812, liderada por la heroína Manuela Gandarillas. Mediante la Ley del 8 de noviembre de 1927, el gobierno nacional estableció el 27 de mayo como Día de la Madre Boliviana.

Con letras emotivas, la composición rinde homenaje a la abnegación y al amor incondicional de las madres.   Su música, cargada de sentimiento, evoca la fortaleza y la ternura que caracterizan a la maternidad. Este himno, lleno de gratitud y reverencia, resuena en el corazón de quienes reconocen el invaluable papel de las madres en la vida.

Letra Himno a la Madre Boliviana

• Letra:  Roberto Bustamante
• Música:  Filomeno Rivero

Palpitantes de amor y de anhelo
a la madre elevemos la voz,
dirigiendo su imagen al cielo
cual si fuera la imagen de Dios.

En la madre el pesar se depura
la grandeza en su vida se encierra,
bendigamos su inmensa ternura
nuestra dicha suprema en la tierra.

Abnegada soporta las cruces,
que por buena le carga el dolor;
es la ostia su frente de luces,
y su pecho es el cáliz de amor.

Hoy la ciñen laureles y palmas,
y por ella con hondo fervor
en plegarias se tornan las almas
y la espina convirtiese en flor.

Vocabulario

1. Palpitantes: Que late o pulsa con fuerza, usualmente asociado con emociones intensas o situaciones emocionantes.
2. Pesar: Sentimiento de tristeza, aflicción o pesar, generalmente debido a una pérdida o situación desafortunada.
3. Depura: Purificar, limpiar o perfeccionar algo, eliminando impurezas o elementos no deseados.
4. Ternura: Sentimiento de afecto, dulzura y cariño tierno hacia alguien o algo.
5. Suprema: Lo más alto, elevado o superior en calidad, grado o importancia.
6. Abnegada: Que se sacrifica por el bienestar de otros, renunciando a sus propios intereses o deseos.
7. Hostia: Forma consagrada del pan utilizado en la Eucaristía cristiana.
8. Cáliz: Recipiente utilizado para contener el vino consagrado en la Eucaristía cristiana.
9. Ciñen: Rodear, ceñir o ajustar algo alrededor de otra cosa, generalmente de forma ajustada o firme.
10. Hondo: Profundo en términos físicos o metafóricos, denotando intensidad o profundidad.
11. Fervor: Intenso entusiasmo, pasión o devoción hacia algo o alguien.
12. Plegarias: Oraciones o súplicas dirigidas a una deidad o poder superior.

Bibliografía del autor del himno a la madre

Roberto Bustamante

compositor del "Himno a la Madre", nació el 13 de julio de 1890 en Chuquisaca, un departamento de Bolivia, y falleció el 3 de mayo de 1987. Pasó su infancia y adolescencia en esta región, cuya capital es Sucre.

Bustamante siempre fue un apasionado de la música, recorriendo muchos departamentos y cantando sus canciones. Su mayor éxito llegó con la composición del "Himno a la Madre", una canción creada para honrar a las madres del país. Esta obra le permitió consolidarse como un referente en la música boliviana. Su legado perdura hasta hoy, recordando su dedicación y amor por las tradiciones y valores de su tierra natal.

Filomeno Rivero

Filomeno Rivero, el compositor de la música del "Himno a la Madre", nació el 20 de agosto de 1885 en Chuquisaca, Bolivia. Rivero mostró desde joven una gran pasión por la música, desarrollando su talento y dedicándose a la composición de diversas piezas que reflejan la riqueza cultural de su tierra natal.

El "Himno a la Madre" es una de sus obras más destacadas, creada para rendir homenaje a las madres, capturando en su melodía y letra el amor y respeto hacia ellas. Esta composición ha sido interpretada en numerosas ocasiones, convirtiéndose en un símbolo de gratitud y reconocimiento en Bolivia.

Rivero falleció el 10 de mayo de 1960 a los 75 años, dejando un legado musical significativo. Su contribución a la música boliviana y su dedicación a resaltar los valores y tradiciones de su país continúan siendo recordados y celebrados.

Historia del himno

El himno nacional de Bolivia es una pieza musical y literaria que fue compuesta para honrar la valentía y el sacrificio heroico de las mujeres de Cochabamba, en particular durante la batalla en la Colina de San Sebastián el 27 de mayo de 1812. Este día está marcado por la destacada participación de Manuela Gandarillas, una mujer anciana y ciega, que lideró un grupo de mujeres en defensa de la ciudad frente a las fuerzas invasoras durante las guerras de independencia en América del Sur.

El gobierno boliviano, reconociendo el valor y el sacrificio de estas mujeres, promulgó la Ley del 8 de noviembre de 1927, por la cual se establece el 27 de mayo como el Día de la Madre Boliviana. Esta fecha no solo celebra el papel de las madres en la sociedad boliviana, sino que también reconoce su rol crucial en la lucha por la independencia y la formación de la nación boliviana. Este acto legislativo y la conmemoración anual sirven como un recordatorio de la fuerza y la resiliencia femenina, honrando a todas las madres bolivianas como pilares de las familias y la sociedad.

Heroínas de la Coronilla

Las Heroínas de la Coronilla fueron un grupo de mujeres que lucharon durante la guerra de independencia del Alto Perú (hoy Estado Plurinacional de Bolivia), el 27 de mayo de 1812, en la ciudad de Cochabamba, enfrentándose al general realista José Manuel de Goyeneche (1760-1814). Este atacó la ciudad después de vencer en la Batalla de Pocona. Las mujeres de la ciudad, lideradas por Manuela Gandarillas al verse sin el Ejército patriota, se organizaron y decidieron resistir a los españoles. Se atrincheraron en la punta de la colina de San Sebastián, en el lugar conocido como La Coronilla, a unos 1400 metros del centro de Cochabamba (actualmente en el centro de la ciudad), donde los soldados realistas las vencieron. En memoria de su valentía, en 1927, mediante la Ley del 8 de noviembre, el presidente Hernando Siles Reyes instituyó el 27 de mayo como el Día de la Madre en Bolivia.

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